TIERRA NOTICIAS. En Argentina la trágica muerte de un joven albañil sacude a la comunidad boliviana residente en ese país. Amigos y familiares denuncian el hecho como un crimen motivado por la xenofobia.

En las redes sociales, el dolor fue inmediato. “Ante el racismo no hay peros que valgan. Nada justifica este acto inhumano y cobarde por parte del perpetrador”, escribió una mujer boliviana. Otra usuaria lamentó el suceso y pidió justicia.

Iber Mamani, también integrante de la comunidad, sostuvo: "Los discursos de odio matan. Nadie va a socavar el dolor que hoy vive una familia y la comunidad boliviana en la Argentina". Y agregó: "Al odio debemos combatirlo con solidaridad y apoyo".

La víctima, un hombre de 36 años identificado como Richard Flores Mercado de nacionalidad boliviana, fue hallado muerto en su vivienda de Ezpeleta, horas después de haber sido golpeado brutalmente por un expolicía y vecinos, tras protagonizar un incidente de tránsito en estado de ebriedad.

El episodio ocurrió el pasado sábado 3 de mayo en la intersección de la Avenida Florencio Varela y la calle 125, en el partido bonaerense de Quilmes. Según informes de medios locales, Flores Mercado conducía su vehículo cuando subió a la vereda, chocó contra un cartel y varios cajones de una verdulería, sin haber provocado peatones heridos.

En esa circunstancia, vecinos y comerciantes comenzaron a insultarlo. "Que se vaya a su país", le gritaron. "No respetás a nadie", lo increparon. Un expolicía lo golpeó brutalmente en la cara que desmayó a Flores Mercado. La agresión continuó mientras estaba en el piso.

El crimen fue registrado por un testigo y el video circula por redes sociales. En las imágenes, se lo ve a Flores Mercado tambaleante, apoyado sobre su auto, cuando recibe el golpe en la cabeza y cae desmayado en el piso. El agresor es un expolícía y no estaba ebrio.

"A Richard lo mataron de una piña, sin anestesia. No fue una riña de bar, no fue una pelea entre iguales. Fue una agresión cobarde", denuncian sus amigos en Facebook. Tras recuperar la conciencia, Flores Mercado se retiró del lugar.

Según la versión policíal, más tarde, supuestamente un amigo lo encontró colgado en su vivienda. "Estaba colgado del cuello con un cable y el otro extremo a unas rejas de la ventana, sin signos vitales", informaron.

Según Alfonso Choque, boliviano residente en Argentina, el expolicía agresor de Flores Mercado es el dueño de la panadería que hoy está prófugo. En el video que circula en redes sociales, este expolícía propina un golpe letal en la cara al boliviano que ocasiona se desplome golpeándose brutalmente contra el suelo.

Choque entrevistado por radio Fides en Bolivia, relata que Richard Flores Mercado falleció en la habitación que alquilaba después del mortal golpe propinado por el expolicía. También descarta que la víctima se haya suicidado, tal cual es la versión de la policía. Richar Flores nunca fue atendido en un hospital para ser atendido por el brutal golpe que lo desmayó.

"Este joven sale con la movilidad embriagado y lamentablemente se sube a la vereda choca contra las cajas de verdulería y un cartel de una panadería y ahí es donde lo agarra y lo increpa. El dueño de esta panadería es un expolicía, este señor le abre la puerta (del vehículo) y le empieza a insultar le da un golpe final lea noqueado a Richard, lamentablemente esta persona está prófuga", señala Choque.

En su relato, el entrevistado rechaza el rumor de que Richard Flores se haya suicidado y atribuye la muerte del joven boliviano al letal golpe propinado por el expolicía y por falta de una atención médica adecuada debido a la gravedad del golpe seguido de la pérdida de conocimiento.

"Lo que es lamentable, no se sabe, la policía llegó hasta su domicilio y redactó, diciendo que, 'este joven se había suicidado en su hogar, había aparecido colgado', y eso empezó a correr como rumor en la zona de Ezpeleta. Pero no es así, el joven falleció en el lugar (donde vivía), por el golpe que se dio, como se ve en video", asevera Choque.

Según otros testigo, el ciudadano boliviano fue golpeado por tres hombres, uno detrás del otro, habiendo sufrido rotura y hundimiento en el craneo. Richard Flores no podía defenderse porque esta ebrio. Según la testigo, en Argentina no hay justicia para los migrantes bolivianos.

La investigación está a cargo de Gabriela Mateos, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Descentralizada número 3 de Berazategui, y por ahora está caratulada como "Averiguación de Causales de Muerte".

"Estaba colgado del cuello con un cable y el otro extremo a unas rejas de la ventana, sin signos vitales", indicaron fuentes policiales que agregaron que la víctima "tenía problemas de adicción a las bebidas alcohólicas".

Según el informe inicial de la autopsia, Flores Mercado murió como consecuencia de una "insuficiencia respiratoria aguda, asfixia mecánica por ahorcadura".

Richard Flores Mercado tenía 36 años, era oriundo de Cochabamba y vivía en Berazategui. Se ganaba la vida como albañil. Este jueves, su madre lo despidió para siempre.

Viajó especialmente desde Bolivia para enterrarlo en Ezpeleta, donde fue encontrado sin vida. Su muerte sacudió a la comunidad boliviana en Argentina, que la denunció como un crimen atravesado por la xenofobia.

La Embajada de Bolivia expresó su "profunda consternación" por lo ocurrido y calificó la muerte de Flores Mercado como producida en "circunstancias xenófobas". En un comunicado público, la delegación diplomática reclamó "una investigación exhaustiva y transparente para esclarecer este hecho, sancionar a los responsables y adoptar medidas preventivas".

La conmoción no se apaga. La historia de Richard, el joven albañil que manejó ebrio, fue golpeado con saña, humillado por su nacionalidad y luego apareció muerto, expuso una herida abierta. Su nombre, ahora, se suma al reclamo de una comunidad que exige ser escuchada.

Tierra Plus/rc

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